Tabla de contenido
¿Cómo escribir un buen personaje femenino?
6 consejos para crear un personaje femenino fuerte y real
- Deja a un lado las exigencias físicas.
- Dale un papel activo en la historia.
- Aplica el test de Bechdel.
- Crea una mujer real.
- Si vas a ser sexista, hazlo de forma consciente.
- No conviertas a la mujer en un hombre que puede parir.
¿Cómo hacer un personaje creíble?
¿Sabes cómo crear personajes creíbles?
- Hacer que el personaje sea excepcional en algo.
- Haz que el personaje se preocupe por alguien que no sea él mismo.
- Haz que tus buenos personajes hagan cosas malas y los malos hagan cosas buenas.
- Dale a tu personaje una voz única.
- Crea personajes apasionados.
¿Cómo desarrollar un personaje animado?
Los personajes de caricaturas deben ser desbordados, con detalles y rasgos exagerados y dramáticos. Por ejemplo, si tu personaje es estudioso y tímido, quizás sus ojos sean hundidos y siempre mire hacia abajo. Los detalles exagerados pueden ilustrar los rasgos de tu personaje sin mencionarlos de forma explícita.
¿Cómo hacer que tus personajes femeninos sean auténticos y geniales?
Y para que tus personajes femeninos sean así de auténticos y geniales, inspírate con buenos ejemplos, no con estereotipos. No veas a las mujeres, chicas, incluso niñas de tu obra como doncellas indefensas. Ellas también pueden dar tanta guerra (o más) que un hombre.
¿Qué es un personaje?
Un personaje es a quien le suceden los hechos que el narrador cuenta, y que puede ser una persona, un animal o, incluso, un objeto animado o no. Lo más importante, es que cada uno de ellos tiene una determinada personalidad propia que es única.
¿Cuál es la figura del personaje femenino en el cine?
Sobretodo en el cine, la figura del personaje femenino queda reducida a una cara bonita con un cuerpo despampanante, que hace cosas sin valor para la trama, como enamorarse del protagonista o reafirmar la condición de héroe del mismo. Seguro que se te ocurre algún ejemplo.
¿Cómo hacer un perfil de un buen personaje?
Hacer un perfil de un buen personaje, que sea real y creíble, es uno de mis momentos preferidos a la hora de escribir. Es como modelar en arcilla tu criatura, dándole forma, proporción, perspectiva y luego, color.
