Tabla de contenido
¿Qué pasa cuando se abre una botella de una bebida carbonatada?
Cuando se reduce la presión, por ejemplo al abrir la botella, el gas se disocia de la solución, creando las burbujas características.
¿Por qué no se deben congelar las bebidas carbonatadas?
Cuando un refresco se somete a temperaturas de congelación, las burbujas de dióxido de carbono son capaces de unirse más fácilmente debido a que el agua en el refresco se está solidificando con otras moléculas de agua.
¿Qué pasa cuando se calienta una bebida gaseosa?
Lo que sucede es que, una vez evaporada el agua de la gaseosa, va quedando el azúcar que contiene el producto y al igual que pasa si cocinamos caramelo, el azúcar empieza a espesarse.
¿Qué pasa si pongo un refresco en el congelador?
Cualquier líquido en un envase de cristal o una lata podría explotar. No es ningún secreto que los líquidos se expanden al meterlos al congelador. La misma lógica puede aplicarse a las latas e incluso envases de plástico. «El líquido puede romperse e incluso explotar al congelarse», cuenta Murphy.
¿Qué son las bebidas carbonatadas?
Las bebidas carbonatadas, o gaseosas, son muy populares. Las burbujas hacen que estas bebidas sean refrescantes y alentadoras, sobre todo si se sirven frías con hielo. Cuando un refresco está frío, las burbujas estallan casi en tu lengua.
¿Por qué las bebidas azucaradas te dejan saciedad?
Esta relación puede ser el resultado de que las bebidas azucaradas tienen un alto índice glucémico y que escasamente te dejan una sensación de saciedad.
¿Cuál es la relación entre la diabetes y las bebidas gaseosas?
Este hecho es muy importante, dada su directa relación con la Diabetes Mellitus tipo 2. Existen evidencias de que las mujeres que consumen más de 2 bebidas gaseosas al día (500 cc o medio litro) tienen mayor probabilidad para desarrollar enfermedad coronaria o un accidente cerebro vascular.
¿Cómo afectan las bebidas azucaradas a la obesidad?
Las bebidas azucaradas (con azúcar añadida en su formulación), en las que se incluyen las conocidísimas bebidas saborizadas de las grandes industrias internacionales, los jugos de frutas y principalmente las bebidas carbonatadas, se han visto asociadas claramente con este aumento en las cifras de obesidad.