¿Cómo se limpia el horno con productos caseros?

En un bol mezcla un vaso de bicarbonato de sodio, un vaso de agua y un chorro de vinagre. Después hay que remover la mezcla y aplicarla sobre la suciedad del horno con un estropajo. No se trata de frotar sino de dejar la mayor cantidad del producto que hemos preparado sobre la superficie a limpiar.

¿Qué es lo mejor para sacar la grasa del horno?

Encendemos el horno a unos 200°C, ponemos la fuente con el zumo de limón dentro y lo dejamos por unos 30 minutos, o hasta que el zumo se evapore. Apagamos el horno, dejamos entibiar unos minutos para no quemarnos, y con un paño humedecido en agua retiramos la grasa que se habrá aflojado.

¿Cómo limpiar el horno sin esfuerzo?

Pero hay productos naturales (o químicos pero de uso casero como el bicarbonato) que se usan de toda la vida por su poder desengrasante. Vamos a ver cómo limpiar el horno sin esfuerzo (o con mucho menos del previsto) usando productos que seguro tenéis en casa:

¿Cómo limpiar el horno con limón?

Vamos a ver cómo limpiar el horno con limón: Exprimimos 3 o 4 limones, ponemos el zumo dentro de una fuente apta para horno, con las mitades de limón exprimidas dentro. Encendemos el horno a unos 200°C, ponemos la fuente con el zumo de limón dentro y lo dejamos por unos 30 minutos, o hasta que el zumo se evapore.

¿Cómo limpiar el horno con sal?

Limpie el horno con un paño húmedo y espolvoree generosamente con sal. Calentar el horno a 50 grados y esperar a que la sal se dore. A continuación, deje enfriar el horno y limpie la sal (junto con la suciedad) del horno con un paño húmedo.

¿Por qué es tan difícil limpiar el horno?

Limpiar el horno es una de las «pesadillas» de la cocina: la incomodidad de tener que plegarse y prácticamente meterse dentro para limpiarlo hace que muchos de nosotros no lo hagamos con la frecuencia necesaria, y es un error: la grasa se incrusta y luego es mucho más difícil de limpiar.