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¿Cómo incluir al lector en un texto?
Por tanto, tienes que escribir para enganchar al lector….Siete formas efectivas de escribir para enganchar al lector
- Persuadir con el detalle.
- Emocionar.
- Cada escena deba aportar al conjunto de la trama.
- Evitar el relleno.
- Profundizar.
- Lo específico mejor que lo general.
- A veces contar puede ser suficiente.
¿Por qué se necesita introducir en el tema al lector?
La introducción es el primer contacto del lector con el cuerpo de tu texto, ¡por eso debe ser seductora! Por esa razón, la introducción es imprescindible para garantizar que tu texto sea leído hasta el final.
¿Cómo hacer las escenas de un guión?
Una vez tengas una idea aproximada de lo que vas a contar, haz un boceto mental básico sobre lo que debe ocurrir en la secuencia que vas a desarrollar. Estas palabras funcionan como un elemento actualizado de la escaleta, pero ya centrado en el momento en que vas a desarrollar la escena.
¿Cómo acabar con la atención de un lector?
Ninguna forma es más efectiva para acabar con la atención (y la paciencia) de un lector que acumular páginas y páginas en las que no sucede nada.
¿Cuándo es necesario contar para enganchar al lector?
Pues bien, hay ocasiones en las que para enganchar al lector no es necesario mostrar y basta con contar. ¿Cuándo basta con contar? Cuando la narración es meramente informativa y, por tanto, no necesitamos que resulte persuasiva o que apele a las emociones. Veamos.
¿Qué es una escena narrativa?
¿Qué es una escena narrativa? La escena es la unidad narrativa mínima con introducción, nudo y desenlace. Mucho se habla en la escuela y en los cursos de escritura sobre estas tres partes en la novela, pero se olvida la unidad fundamental que te permitirá sustentar esa estructura: la escena.
¿Por qué es importante aprender a escribir por escenas?
Sin los cimientos de la escena todo el edificio narrativo se derrumba. Pero no solo es necesaria para estructurar la novela, aprender a escribir por escenas te ayudará a enfrentarte a la titánica tarea en cómodos fascículos. Anne Lamott decía algo parecido en Bird by bird.
