¿Cómo explica San Agustín la existencia del mal?
El mal no es más que la corrupción o pérdida de las características que constituyen a todo ser. Es el daño que sufren las criaturas en virtud de su vulnerabilidad radical, daño que prueba su bondad ontológica (Agustín, 1964: VII, 12, 18 y 13, 19; 1982a: III, 13, 36).
¿Qué es el mal en general?
Metafísicamente, que es la acepción más general, se dice que el mal es “lo contrario al bien”: dicho de una cosa, significa que es nociva o daña y lastima, y así se habla de mal cuerpo, del mal humor; dicho de una propiedad, es la enfermedad, la dolencia, la desgracia, la calamidad.
¿Qué es el mal y el libre albedrío en San Agustín?
Para San Agustín “el libre albedrío fue concedido al hombre para que conquistara méritos, siendo bueno no por necesidad, sino por libre voluntad”, además, “es soporte de todo el orden moral”, el principio esencial de un mundo de valores superiores, y, por consiguiente, un grande bien.
¿Cuál es el ejemplo de un argumento?
Un ejemplo de un argumento es el siguiente: «Como el precio de los departamentos es caro y los intereses son altos, hoy es un mal momento para comprar un departamento» Este argumento podemos clarificarlo de la siguiente manera: (1) y (2) constituyen las premisas y (3) constituye la conclusión.
¿Cuál es el valor de un argumento?
En este caso, se le da valor a aquello que sea real, verdadero y posible, al contrario de lo inexistentes, imposible o falso. En este tipo de argumento el valor reside en aquello que se considera como justo, al contrario de lo que se considera como injusto.
¿Cuáles son los argumentos de cantidad?
Es aquel que se basa en preferir aquello que es agradable sobre lo desagradable. ARGUMENTO DE CANTIDAD. Este se basa en la utilización de argumentos que apoyan aquello que tiene más cantidad ya que posee algo de un gran valor con respecto a los que tienen menos. ARGUMENTO DE CALIDAD.
¿Qué son los argumentos de principio general?
Argumentos de principio general o de generalización. Aquí la conclusión se genera a partir de una serie de eventos similares que se toman como una generalidad. Este tipo de argumento es expresión del razonamiento inductivo por excelencia. Un ejemplo sería: «En invierno me da sinusitis.