¿Cuáles son los beneficios de la ventilación en el ático?

La ventilación ayuda a regular la temperatura del ático, también puede contribuir a regular la temperatura del resto del hogar. Ayuda a evitar la acumulación de humedad en el ático y, en los meses más fríos, esto a su vez permite prevenir problemas de condensación que pueden afectar los materiales del espacio del ático, en especial el aislamiento.

¿Cómo lograr una ventilación adecuada del techo y el ático?

La clave para lograr una ventilación adecuada del techo y el ático es el equilibrio: la cantidad de espacio que dedique a la entrada de aire debe ser igual a la que deje para la salida, y ambas deben calcularse en función del tamaño del ático y la pendiente del techo.

¿Cómo calcular los requisitos de ventilación del ático?

Para calcular los requisitos de ventilación del ático, puede determinar los pies cuadrados que tiene el piso del ático (ancho por longitud) y comparar esa cifra con el «área libre neta» (ALN) requerida en total. Las ventilaciones se califican de acuerdo con su ALN, es decir, la cantidad de espacio para la entrada o salida de aire.

¿Cuáles son los beneficios de la ventilación del techo?

Ayuda a proteger la vida útil de los materiales de techado (la condensación es una de las principales causas de daños en los materiales del techo, como las tejas asfálticas ). Le ayuda a cumplir con la mayoría de los códigos de construcción locales, que a menudo exigen una ventilación adecuada del ático en la vivienda.

¿Qué son las salidas de ventilación del baño y la cocina?

Las salidas de ventilación del baño y la cocina no son un tipo de ventilación del techo. Cabe destacar que estas ventilaciones, que expulsan el aire caliente y húmedo del baño y del área de preparación de comidas de la vivienda, necesitan sus propios conductos y campanas, que dirigen el aire hacia el exterior del hogar.

¿Cómo funcionan las entradas de ventilación?

Para aprovechar al máximo este efecto, las entradas de ventilación de la vivienda generalmente se instalan en la parte más baja del techo (cerca de los aleros), mientras que las salidas de ventilación se ubican en una posición más alta (cerca de la cima), para permitir que el aire frío empuje el aire caliente hacia afuera con mayor facilidad.