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¿Cómo dejar el nombre de un personaje en la historia?
También podrías ponerle «Rufo» al personaje porque es osado y destructivo en la historia. Algunas veces, lo más fácil es establecer primero los demás detalles de un personaje y dejar el nombre para el final. Es posible que la verdadera identidad del personaje se vaya revelando conforme avance la historia.
¿Cómo crear un nombre de personaje?
Inspírate en elementos más sutiles o crea un nombre ligado a ese elemento, pero con más creatividad. Por ejemplo, puedes darle el nombre de un pequeño monstruo de la mitología nórdica. También puedes usar una palabra de otro idioma que haga referencia a una cualidad importante de tu personaje.
¿Cómo elegir un nombre para tu historia?
Por ejemplo, si tu historia se desarrolla antes de la Guerra Civil estadounidense, elige un nombre que encaje con ese tiempo. Evita nombres nada congruentes, tales como “Brooklyn” o “Kimberley”.
¿Cómo crear nombres de personajes únicos e interesantes?
De hecho, hay varios métodos que puedes utilizar para crear nombres de personajes únicos e interesantes. Usa un nombre como un apellido. Dado que los nombres y apellidos por lo general suenan muy diferente, romper esta tradición haría a tu personaje un tanto más interesante.
¿Cuál es el rol de los personajes en una historia?
Dedicaré varias entradas a hablar sobre los personajes, pero creo que es necesario comenzar por lo más básico: el rol de cada personaje en tu historia, el papel que van a jugar en nuestro relato. Básicamente tenemos tres: principales (o protagonistas), secundarios y circunstanciales (o comúnmente «de relleno»)
¿Cuáles son los obstáculos de un personaje?
Estos obstáculos pueden tomar la forma de otro personaje, un desastre natural, dificultades financieras o tan solo la mala suerte. De esta forma, crearás un conflicto y tu personaje se verá obligado a tomar decisiones en cuanto a lo que deba hacer.
¿Cómo elegir el nombre de un personaje?
El nombre que elijas debe encajar con el personaje y poder quedarse en la mente del lector. No le pongas un nombre genérico, como Juan Pérez o Jorge López, sino opta por uno que describa quién es el personaje y pueda informarle un poco sobre él al lector.